• 16 científicos y activistas encarcelados por una protesta climática noviolenta en Alemania, de los cuales 5 son españoles.
   
• Estas acciones de desobediencia civil noviolenta visibilizan la verdad que más molesta: no podemos cumplir el objetivo de limitar el calentamiento global a 1,5 grados.
   
• El colectivo Rebelión Científica durante una acción de bloqueo en Munich ha recibido el apoyo de un centenar de teólogos de la Iglesia alemana para “defender la verdad contra la ficción política”.

Múnich, 30 de octubre de 2022. Tras una protesta realizada el pasado sábado 29 de Octubre en la sede de BMW, en Múnich, 16 miembros de Scientist Rebellion / Rebelión Científica fueron llevados a prisión preventiva. Entraron en la sala de una exposición de coches BMW y pegaron documentos dentro y fuera de varios coches. También rociaron con pintura negra varios coches de lujo antes de que la seguridad del edificio les interceptara. Con esta acción pretenden denunciar el greenwashing que practican empresas como BMW, y exigir al gobierno alemán que el sector del transporte del país se descarbonice rápidamente.

Permanecen detenidos hasta el viernes 4 de noviembre, a excepción de dos que serán puestos en libertad los días 1 y 2 de noviembre. Estas 16 detenciones se suman a la de otro científico que lleva arrestado desde el 28 de octubre, tras participar en un bloqueo de carreteras con Rebelión Científica.

Entre las personas detenidas se encuentran 5 españoles: el ambientólogo Victor de Santos, el doctor en física y matemáticas Mauricio Misquero, los ingenieros Fernando Rojas  y Joseba Sáenz de Navarrete y la artista y activista Marta Moreno Muñoz.

Los miembros de la Rebelión Científica han informado al juez que decidía sobre su custodia, que seguirían realizando acciones no violentas hasta el 4 de noviembre, momento en el que el foco de atención se centrará en la cumbre climática internacional de la COP27, organizada por la ONU. Desde el 17 de octubre, las acciones de resistencia de la Rebelión Científica en Alemania han ocupado espacios en los ministerios del gobierno y en los salones de automóviles de lujo en Alemania.

¿Por qué estas científicas y estos científicos se arriesgan a ir a la cárcel?

En el Acuerdo de París, las naciones se comprometieron a mantener el calentamiento global por debajo de 1,5C. A pesar de su compromiso oficial, afirma la Dra. Lauranne Gauteau, ecologista tropical que participó en las protestas anteriores, los líderes de nuestras naciones no lo cumplieron. “Ya nunca vamos a cumplirlo (1,5C). Es una mentira. Así que ahora tenemos que decirle a la gente lo que está pasando“.

Nathaniel Rugh, científico medioambiental explica : “Todos aquí formamos parte de la comunidad científica y conocemos los datos actuales de primera mano. Seguir diciendo públicamente que el reto de 1,5°C sigue vivo, ya no es defendible; pero los políticos, los principales académicos y también gran parte del movimiento ecologista persisten en hacerlo. Además de una falsedad, es un enorme error,  porque, de esta manera, las industrias contaminantes y los responsables políticos están siendo alentados a resistirse a la rápida descarbonización“.

El apoyo de la Iglesia alemana: “defender la verdad contra la ficción política”

El 28 de octubre, paralelamente a la conferencia del partido conservador CSU, científicos y religiosos han bloqueado una carretera en Múnich, frente al Ministerio de Justicia. Los teólogos implicados enviaron un llamamiento a todos los responsables de la Iglesia católica en Alemania. Los 102 firmantes, entre los que se encuentran profesores y superiores religiosos, exigen que los teólogos también tomen medidas concretas, contribuyendo a interrumpir las actividades habituales. Declararon: “Nosotros teólogos, como Rebelión Científica, tenemos el deber de ser sinceros con el público y hacer que la sociedad sea consciente de la realidad física y ecológica frente a la ficción política”.

Además de la descarbonización masiva del sector del transporte, Scientist Rebellion y la coalición Unite Against Climate Failure piden al gobierno alemán que reclame al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional la cancelación de la deuda financiera de los países del Sur Global.

Más de 1.000 académicos de alrededor de 40 países han firmado una carta abierta en la que piden a sus colegas “compartir con el público lo que comparten entre ellos sobre la respuesta del mundo al cambio climático y la pérdida de biodiversidad” y afirmar que ya no es defendible decir públicamente que el límite de calentamiento global de 1,5 °C sigue siendo válido.La carta abierta organizada y autopublicada por el grupo de acción climática Scientist Rebellion ha sido firmada por destacados académicos y autores principales del IPCC.

Bajo el lema Unidos frente al fracaso climático esta campaña de movilización fue realizada conjuntamente con Scientist Rebellion,  Letzte Generation, Debt for Climate, Extinction Rebellion Berlin, End Fossil Occupy y Jetzt oder Nie – Eltern gegen die Fossilindustrie.